COLLUD A INICIOS DEL SIGLO XX

Don    Justo Iturria Chanta nos habla del Collud de inicios del siglo XX, nos relata que el pueblo estaba ubicado en la parte baja de la huaca y  se ubicaba al lado oeste extendiéndose hacia el sur. En la parte alta de la Huaca solo existía la casa hacienda en la que según le contaron, hasta el año 1920 residía Don Vicente Gutiérrez quien era el dueño de esta hacienda y responsable del área de campo, sus demás hermanos y copropietarios residían en Pomalca. Las viviendas de los obreros eran de caña con barro y sus techos eran de hinea.

La pirámide principal por esos tiempos era de forma más extendida, se podía subir fácilmente por cualquiera de sus costados y por donde hoy es la pampa de futbol era un bosque de cuncunos.

Las más antiguas familias que habitaron estas rústicas viviendas fueron los Iturria, Puicón, Chumioque, Sernaqué, Charines, Fenco, Olano Guevara, Cobeñas, Ramos, Gonzáles,.

En el año 1945 se construyen las 5 primeras viviendas de adobe en la parte alta junto a la antigua casa hacienda y llegan nuevas familias: los Ñique, Fernández, Clavo, Benites Lachira, Suyón, Yovera y Velásquez.

Las pocas familias que residían en Collud, al llegar la noche no podían salir, ni siquiera al atardecer, mucho menos dirigirse a la acequia porque en ella encontraban a las gentiles recogiendo su agua en porrones  y lavando su ropa, por este motivo los residentes se pusieron de acuerdo para instalar en la parte alta de la huaca una cruz de palo que fue donada por don Ernesto Benites esto sucedió el primero de mayo de 1947. Fue su hijo don Herminio Benites quien se hizo cargo de esta celebración, luego  le sucedió  don Adriano Fernández, quien logró en su periodo la confección de un bello  manto para la cruz. Luego pasó a cargo de don Manuel Suyón, luego a Juan Imán, nuevamente a Herminio Benites luego a don Miguel Vite Lazo y actualmente a Don Julio Sernaqué Guevara. Según don Justo Iturria esta cruz puso fin a tantos apariciones extrañas y sobrenaturales en Collud.

El año 1950 se construyen nuevas viviendas en la parte alta junto a las 5 anteriores. Los primeros administradores fueron don Manuel Bazán, luego don Julio Pita, Felipe Carpio, y finalmente don Luis Páez. Los mayordomos fueron don Antonio Lachira, Pedro Vallejos, Simón Míñope, y don Merino.